En el presente artículo se analiza el problema del analfabetismo en los países de Iberoamérica y su relación con la pobreza y la desigualdad. Se destacan las transformaciones que ha sufrido el concepto de alfabetización, el cambio del enfoque: de saber o no saber al poder aprender y reaprender a lo largo de la vida. Se enumeran los obstáculos en los países del habla hispana para cumplir con los propósitos de enseñanza universal y de calidad adoptada por la ONU (meta ODS4): segregación por razones socio-económicos, culturales (población indígena), zonas rurales y urbanas, falta de las infraestructuras necesarias, acceso a las TICs en los centros escolares, desigualdad de género, abandono escolar temprano, bajo rendimiento académico. En las estadísticas proporcionadas por la autora se ve que en los últimos 10 años los países de la región lograron avanzar mucho en el tema de escolarización primaria, especialmente los países de Centroamérica. No obstante, la formación secundaria completa casi para todos los Estados (especialmente entre las familias pobres y centros rurales) sigue siendo muy baja, o sea, menos del 50%.
This article analyzes the problem of illiteracy in the countries of Latin America and its relationship with poverty and inequality. The transformations undergone by the concept of literacy stand out, the change in approach: knowing or not knowing by being able to learn and relearn throughout life. The obstacles in Spanish-speaking countries are listed to meet the universal and quality education purposes adopted by the UN (SDG-4 goal): segregation for socio-economic, cultural (indigenous population), rural and urban areas, lack of necessary infrastructure, access to ICTs in schools, gender inequality, early school leaving, poor academic performance. In the statistics provided by the author, it is seen that in the last 10 years the countries of the region have made great progress in the area of primary schooling, especially the countries of Central America. However, complete secondary education for almost all states (especially among poor families and rural centers) remains very low, that is, less than 50%.